Nuestra única arma: la cámara

Desde los estudios de fotos no se contempla la fotografía como un proceso de proyección de
imágenes y su captura, sino como un arte donde se plasma una acción, un momento acompañado en
su mayoria de veces por una amalgama de colores y un juego de luces y sombras que convierten a un
trozo de papel en una gran composición.
Pero…¿Quién ha dicho que esto no pueda suceder en una fiesta, en una comunión o una boda? Cada
vez el mundo fotográfico se va adaptando a nuevos cambios y nuevos estilos. Un buen ejemplo es la
fotografía de eventos en Sevilla donde más que fotografía se produce arte . En este caso es legal
disparar todas las veces que se quiera hacia un objetivo, ¿Cómo?A través de la mirilla, de la cámara.